jueves, 18 de enero de 2024

Nawal El Saadawi

Nawal El Saadawi fue una escritora, médica y activista feminista egipcia que nació el 27 de octubre de 1931 en Kafr Tahla (Egipto) y falleció el 21 de marzo de 2021 en El Cairo (Egipto).
Su trabajo abarcó una amplia variedad de temas, pero se destacó principalmente por sus contribuciones feministas y sus críticas al patriarcado y las prácticas opresivas hacia las mujeres en la sociedad árabe.
El Saadawi escribió numerosas novelas, ensayos y obras de no ficción, donde aborda cuestiones relacionadas con la opresión de las mujeres y las estructuras patriarcales en el contexto de la sociedad egipcia, además de denunciar también la práctica de la mutilación genital femenina, un tema que abordó con valentía, que la llevó a enfrentarse a amenazas, persecuciones y censura, y que le llevó a perder su trabajo como directora general de Salud Pública del gobierno egipcio.
Además de su trabajo como escritora, Nawal El Saadawi fue también una apasionada activista por los derechos de las mujeres y la justicia social.
Dejó un legado significativo en el ámbito de los derechos de las mujeres y sigue siendo recordada como una influyente voz en la lucha por la igualdad de género en el mundo árabe, convirtiéndola en una de las figuras más importantes en la historia contemporánea por su valentía y compromiso con los principios feministas, además de por su legado literario.






El feminismo es liberar la mente del sistema patriarcal, de la religión y del capitalismo, que son las principales amenazas para la mujer. Aunque no solo son amenazas para la liberación de la mujer sino también para los pobres. Yo no separo entre la opresión de clase y la opresión patriarcal. Para mí, están relacionadas y siempre van juntas de la mano. De hecho, para mí una mujer es independiente cuando se alimenta por sí misma.



En el fondo de sus pensamientos el patriotismo significaba la muerte de los pobres en defensa de la tierra de los ricos.

"Mujer en punto cero"





lunes, 15 de enero de 2024

Andrés Henestrosa

Andrés Henestrosa Morales fue un poeta, ensayista, escritor, político (diputado y senador por su estado), bibliófilo, historiador y periodista mexicano que nació el 30 de noviembre de 1906 en San Francisco de Ixhuatán (Oaxaca, México) y falleció el 10 de enero de 2008 en México D.F.
Participó activamente en la defensa de los derechos indígenas, contribuyendo a la fonetización del idioma zapoteco y su transcripción al alfabeto latino, además de promocionar la cultura y lengua zapoteca, demostrando su profundo amor por la cultura mexicana.






Aspiración al llanto

Y ¿por qué no he decirlo
si es verdad
que hay días en que tengo
muchas ganas de llorar?
Nadie me ha ofendido,
nada está fuera de su lugar:
el día se levanta claro y azul,
la noche coge amorosamente la luz,
pero, ¿por qué es que tengo a veces
tantas ganas de llorar?
Un llanto que así me llega de tan lejos,
que ignoro la fuente de donde mana,
que se me figura el todas las penas del mundo,
¿Por qué he de avergonzarme de verterlo
ante los hombres?
Pues ¿quiénes han de llorar sino los hombres,
sino aquel que por serlo comprende el tamaño de una pena,
o el tamaño de una dicha,
las solas dos cosas que nos hacen llorar?
Pero no solo, amiga,
¿no te dije alguna vez que las lágrimas caen de rodillas
si las produce la desdicha, pero de pie
si la alegría?
¿Por qué esa hoja que lo mismo que una lágrima
se desprende del árbol
y suavemente se posa sobre la tierra,
me enternece ciertos días?
¿Por qué esa nube que boga por el cielo
como un velamen de plata,
lleva en el vientre lágrimas,
que buscan mis ojos para disolverse?
¿Por qué esa brisa inocente
tiene a veces fuerza de huracán?
Ya sé, amiga, que no son solo mis penas,
ni solas mis dichas,
sino las del mundo y las del hombre
las que así, a veces, sin quererlo,
me hacen llorar.





sábado, 13 de enero de 2024

Jesús Quintero

Jesús Rodríguez Quintero, más conocido como Jesús Quintero o El loco de la colina fue un periodista, director y presentador de programas de radio y televisión español que nació el 18 de agosto de 1940 en San Juan del Puerto (Huelva, Andalucía) y falleció el 3 de octubre de 2022 en Ubrique (Cádiz, Andalucía).
Su carrera comenzó en la radio, pero alcanzó la fama en la década de los 90 con su programa de televisión El vagamundo y, más tarde, con Ratones coloraos, programas que se caracterizaban por sus entrevistas y conversaciones profundas con personas de distintos ámbitos de la cultura y la sociedad, programas que le dieron una gran popularidad, con un formato en el que se alejaba de las preguntas convencionales, teniendo la habilidad de crear un ambiente relajado y permitiendo que sus invitados se expresaran libremente y de manera más personal, dando como resultado conversaciones más íntima y emotivas.
Además de su trabajo en televisión, Jesús Quintero también ha incursionado en el mundo de la radio y la literatura.






Siempre ha habido analfabetos, pero la incultura y la ignorancia siempre se habían vivido como una vergüenza. Nunca como ahora la gente había presumido de no haberse leído un puto libro en su jodida vida, de no importarle nada que pueda oler levemente a cultura o que exija una inteligencia mínimamente superior a la del primate.
Los analfabetos de hoy son los peores porque en la mayoría de los casos han tenido acceso a la educación, saben leer y escribir pero no ejercen.
Cada día son más y cada día el mercado los cuida más y piensa más en ellos. La televisión se hace cada vez más a su medida. Las parrillas de los distintos canales compiten en hacer programas pensados para una gente que no lee, que no entiende, que pasa de la cultura, que quiere que la diviertan o que la distraigan aunque sea con los crímenes más brutales o con los más sucios trapos de portera.
El mundo entero se está creando a la medida de esta nueva mayoría, amigos. Todo es superficial, frívolo, elemental, primario, para que ellos puedan entenderlo y digerirlo. Esos son socialmente la nueva clase dominante, aunque, siempre será la clase dominada, precisamente por su analfabetismo y su incultura, la que impone su falta de gusto y sus morbosas reglas.
Y así nos va a los que no nos conformamos con tan poco, a los que aspiramos a un poco más de profundidad.