martes, 31 de enero de 2023

Louis Pasteur

Louis Pasteur fue un químico, físico, matemático y bacteriólogo francés que nació el 27 de diciembre de 1822 en Dole (Francia) y falleció el 28 de septiembre de 1895 en Marnes-la-Coquette (Francia), cuyos descubrimientos tuvieron una gran importancia en diversos campos de las ciencias naturales, especialmente en la química y microbiología, considerándolo como el pionero de la microbiología moderna, fundamental en la medicina moderna y la microbiología clínica, que condujo a innovaciones como el desarrollo de las vacunas, los antibióticos, la esterilización (a él se le debe la técnica de las pasteurización) y la higiene como métodos efectivos de cura y prevención contra la propagación de las enfermedades infecciosas.






Es la superación de dificultades lo que hace héroes.





sábado, 21 de enero de 2023

Sigue latiendo...


Tengo el alma herida
columpiándose en el vacío sobre el que cuelgan mis pies desnudos

Tengo la piel sangrando
con dentelladas de la soledad que recorren mis ojos

Me tiemblan los sentidos
que se posan en las arenas movedizas de mis miedos

Pero mi corazón sigue latiendo,
si, sigue latiendo,
y no sé muy bien cómo,
y no sé muy bien por qué,
y no sé muy bien hasta cuando,
pero sigue latiendo
con la esperanza de encontrar el camino
que ilumine mis esperanzas

SsJ






miércoles, 11 de enero de 2023

Atahualpa Yupanqui


Atahualpa Yupanqui es el nombre artístico de Héctor Roberto Chavero, cantautor, guitarrista, poeta y escritor argentino que nació el 31 de enero de 1908 en Juan A. de la Peña (Pergamino, Buenos Aires, Argentina) y falleció el 23 de mayo de 1992 en Nîmes (Francia).
Es uno de los más grandes representantes del floklore argentino y en 1986 Francia lo condecoró como Caballero de la Orden de las Artes y Letras Musicales.






La guitarra antes de ser instrumento fue árbol y en él cantaban los pájaros. La madera sabía de música, mucho antes de ser instrumento.






viernes, 6 de enero de 2023

Paulo Freire

Paulo Reglus Neves Freire fue un pedagogo y filósofo brasileño que nació el 19 de septiembre de 1921 en Recife (Pernambuco, Brasil) y falleció el de mayo de 1997 en Sâo Paulo (Brasil).






El sistema no teme al pobre que pasa hambre, teme al pobre que sabe pensar





miércoles, 4 de enero de 2023

Ana Bernal Triviño


Ana Isabel Bernal Triviño es una periodista e investigadora española que nació el 14 de septiembre de 1980 en Málaga (Andalucía). Es doctora en Periodismo y profesora de la Universidad Abierta de Cataluña (UOC), siendo sus áreas de investigación los entornos digitales y las tecnologías, las redes sociales, la transversalidad de la perspectiva de género, los derechos de las mujeres y la violencia de género.







Que no se angustien ni carguen con culpa las madres que no pudieron regalarnos nada cuando ellas querían. Cuando nos decían una y otra vez "estudia, estudia, y no dependas de nadie", ya nos hicieron el mejor regalo que pudieron: ser libres.





martes, 3 de enero de 2023

Soy...


Soy todo lo que callo y le que digo al mirarte
Soy todo lo que siento,
lo que canto,
lo que escribo

Soy mis lágrimas y las sonrisas dibujadas en el viento,
los paisajes de mi infancia,
el aroma de mi madre,
los abrazos escondidos,
los besos al aire

Soy la guerrera de batallas innombrables,
la bruja en el baile del akelarre
que danza libre de prejuicios,
libre de miradas desafiantes

Soy mis cicatrices,
las heridas cosidas con saetas abrasadas,
la página del libro que queda por contar,
los pensamientos,
las emociones,
las horas que marcan el latido de tu alma,
de mi alma,
de las estrellas que nos contemplan caminar

Soy mis aciertos... también mis errores,
la locura templada,
la dulzura revuelta,
el aullido en las noches de luna,
la risa a la orilla del mar,
los límites de mis miedos,
los oasis de mis triunfos,
el jardín donde refugiarme cuando quiero cantar

Soy los sueños que te sueñan,
las estrellas que te miran,
la manos que sujetan la tirita de las tardes sombrías

Soy la espuma que se rompe en la orilla de tu espalda,
los dedos que escalan tus montañas,
la sangre que recorre tu alma,
el volver a casa cuando no sabes dónde estar

Soy a veces sin quererlo
la nota perdida en el silencio del poema,
las teclas deslizadas en tus labios,
el ruido silencioso
la estrofa de tu nombre,
el cielo iluminado,
la voz que te susurra,
la seda de mis dedos,
el aliento en tu boca,
las aceras rotas con los golpes de mi latido
la ascuas sumergidas en tu océano,
la calle que me lleva irremediablemente
al centro de tu ombligo,
a tu hoguera,
a mi hogar

SsJ





Manuel Vicent

Manuel Vicent Recatalá es un escritor español que nació en Villavieja (Castellón) el 10 de marzo de 1936.





EL TIEMPO

El tiempo no existe. El tiempo sólo son las cosas que te pasan, por eso pasa tan deprisa cuando a uno ya no le pasa nada. Después de Reyes, un día notarás que la luz dorada de la tarde se demora en la pared de enfrente y apenas te des cuenta será primavera. Ajenos a ti en algunos valles florecerán los cerezos y en la ciudad habrá otros maniquíes en los escaparates. Una mañana radiante, camino del trabajo, puede que sientas una pulsión en la sangre cuando te cruces en la acera con un cuerpo juvenil que estalla por las costuras, y un atardecer con olor a paja quemada oirás que canta el cuclillo y a las fruterías habrán llegado las cerezas, las fresas y los melocotones y sin saber por qué ya será verano. De pronto te sorprenderás a ti mismo rodeado de niños cargando la sombrilla, el flotador y las sillas plegables en el coche para cumplir con el rito de olvidarte del jefe y de los compañeros de la oficina, pero el gran atasco de regreso a la ciudad será la señal de que las vacaciones han terminado y de la playa te llevarás el recuerdo de un sol que no podrás distinguir del sol del año pasado. El bronceado permanecerá un mes en tu piel y una tarde descubrirás que la pared de enfrente oscurece antes de hora. Enseguida volverán los anuncios de turrones, sonará el primer villancico y será otra vez Navidad. La monotonía hace que los días resbalen sobre la vida a una velocidad increíble sin dejar una huella. Los inviernos de la niñez, los veranos de la adolescencia eran largos e intensos porque cada día había sensaciones nuevas y con ellas te abrías camino en la vida cuesta arriba contra el tiempo. En forma de miedo o aventura estrenabas el mundo cada mañana al levantarte de la cama. No existe otro remedio conocido para que el tiempo discurra muy despacio sin resbalar sobre la memoria que vivir a cualquier edad pasiones nuevas, experiencias excitantes, cambios imprevistos en la rutina diaria. Lo mejor que uno puede desear para el año nuevo son felices sobresaltos, maravillosas alarmas, sueños imposibles, deseos inconfesables, venenos no del todo mortales y cualquier embrollo imaginario en noches suaves, de forma que la costumbre no te someta a una vida anodina. Que te pasen cosas distintas, como cuando uno era niño.